Aquéllos extranjeros del 8.

Un día llegaron esos extranjeros, creo que, esta vez, sólo son tres, no creemos que les falte nada, son felices, pero solo son tres.
A veces oímos que los niños cantan acompañados de una guitarra, a veces los vemos entrar con papeles y pinturas, plastilina y esas cosas. Muchas ocasiones suben las escaleras con ojos puestos en un libro. Siempre nos saludan con una sonrisa.
Se parecen a su padre, es un profesor, parece francés, al menos lo habla.
Los niños tienen ojos grandes y la niña es muy bonita, el tiene chinitos.
No sabemos bien de donde vienen, pero es seguro que no son de aquí, esos nuevos parecen experimentar nuevas cosas aquí.
Este es el diario de nuestra crisis, el testigo de nuestra evolución personal.

martes, 2 de marzo de 2010

“ – Ande tengo un Sugus de Limón, que lo cura todo.


-No me apetece


-Pues se lo guarda que nunca se sabe cuando un sugus le va a sacar a uno de un apuro.






Mena**

1 comentario:

Gaby dijo...

Sobris! Pues pasen los sugus para guardarlos en mi back pack no?...Uno nuuunca sabe cuando los va a necesitar